Hoy os traemos el turrón, su origen y esencia. En estas Navidades, turrón de…¡lo que quieras!

Y es que si ya venimos hablando en otros posts sobre polvorones de almendra, de limón, de canela, de coco o de mazapanes y otros dulces que admiten diversas variedades de sabores, el turrón es, junto con los anteriores, otro elemento destacado de la tradición navideña.

Aunque ya se puede encontrar una extensísima lista de sabores en el mercado, el turrón original es una masa dulce elaborada a base de miel o azúcares a la que se incorporan almendras peladas y tostadas.

A dicha masa se le puede añadir opcionalmente clara de huevo.

Podemos encontrar el turrón en forma de torta o forma rectangular.

Origen

Los frutos secos, el azúcar y la miel fueron productos muy utilizados en Al-Ándalus para la fabricación de numerosos dulces, como pasteles de almendra, pasteles de miel, mazapanes, pestiños,  piñonates, etc.

Se dice que el verdadero origen del turrón se sitúa en la península arábiga, donde en el tratado «De medicinis et cibis semplicibus» del siglo XI, escrito por un médico árabe, se nombra el «turun«.

Se cree por tanto que el pueblo árabe extendió este dulce a las costas del Mediterráneo (España e Italia fundamentalmente).

En el siglo XV nace en Alicante la versión Española y de ahí se hace muy popular en el resto del país, aunque cabe destacar que el turrón de Castuera (Badajoz) data de la misma época, localidad donde puede visitarse el museo del turrón.

Pero, ¿de dónde viene la tradición de consumirlo en Navidad?

Pues de un documento del año 1582 del municipio de Alicante, donde podemos leer que en estas fechas y por aquella época, una parte del salario se pagaba en dinero y la otra, con una arroba de turrón.

Esa costumbre de consumirse en esta festividad se fue extendiendo y haciéndose más popular entre toda la población, aunque era algo ya instaurado en la sociedad más acomodada.

Variedades

Aunque si pensamos en turrón, lo primero que se nos viene a la cabeza es Jijona y Alicante, podemos hablar también de otras ubicaciones, variedades y sabores. Os contamos algunas de ellas:

Turrón de Jijona:

El turrón de Jijona, también conocido como turrón blando, consiste en una masa molida y batida de azúcar,  clara de huevo, miel y almendra marcona. Es necesario dejarlo reposar un par de días para que endurezca y una vez endurecido, se corta y se envasa.

Turrón de Alicante:

Es también denominado turrón duro y para su elaboración, que consiste en una masa de miel, azúcar, clara de huevo y almendra marcona entera, se cuece la miel en una olla especial, se bate, se le agrega el azúcar y la clara de huevo  y se van vertiendo capas de almendras tostadas y peladas. La masa obtenida se deposita en moldes y se cubre con oblea. Posteriormente se corta en barras, se enfrían y se envasan.

Turrón de Agramunt:

Este turrón originario de la provincia de Lérida, se elabora a base de una mezcla de avellanas o almendras, azúcar, miel y clara de huevo y se presenta en tabletas redondas o rectangulares con una oblea de pan de ángel de varios tamaños.

Turrón de Cherta:

Se trata de un turrón quebradizo, de forma circular que consta de 2 barquillos entre los que se encuentra una mezcla de avellanas o almendras tostadas, miel, azúcar y clara de huevo.

Turrón de yema tostada:

Se origina para aprovechar las yemas de las claras que se utilizan en los turrones duro y blando, inspirándose en el sabor de la crema catalana.

Otras variedades de turrones son el turrón de trufa, turrón de chocolate (blanco, negro, con leche, con frutos secos, con arroz inflado…), turrón de coco e incluso sabores más especiales como turrón de nata y nueces, turrón de mazapán y frutas, turrón de pistacho, turrón a la piedra, cacahuete, café, ron con pasas, etc.

Primo hermano del turrón es el guirlache . Este consiste en fundir azúcar con agua hasta formar una pasta de caramelo a la que se añaden almendras e incluso un poco de zumo de limón y un poco de miel, que puede sustituir por completo al azúcar.

El turrón fuera de España

Si viajamos fuera de España encontraremos el nougat, que es un dulce francés, a base de clara de huevo, miel y almendra de aspecto y gusto parecidos al turrón español.

De Italia proviene torrone, muy afamado en Cerdeña, donde se elabora sin azúcar añadido, ya que solo se emplea miel de maquia mediterránea y en Dinamarca es famoso el fransk nougat.

En Oriente Medio, India, Pakistán e Irán existe un dulce muy similar emparentado con el turrón: la halva o turrón de sésamo, hecho con sésamo molido, miel, y a veces fruta o pistacho.

Por último, el turrón de Doña Pepa es un dulce tradicional peruano que data de finales del siglo XVII relacionado con la festividad limeña del Señor de los Milagros, formado por tres o más palos de harina distribuidos de manera similar al juego jenga, bañado con miel de chancaca y decorado con grageas y confites de varias formas y colores.

Después de este repaso a esta joya gastronómica, se nos antojaría un trocito de cada uno de ellos y realmente no sabríamos con cual quedarnos, pero ¿y vosotros? ¿Tenéis  predilección por alguno en especial?

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